No hay nada más eterno que un encuentro fugaz.
Una noche en París. Dos caminos entrelazándose.
No hay nada más eterno que un encuentro fugaz.
Cuando Rhys y Ginger se conocen en las calles de la ciudad de la luz, no imaginan que sus vidas se unirán para siempre, a pesar de la distancia y de que no puedan ser más diferentes. Ella vive en Londres y a veces se siente tan perdida que se ha olvidado hasta de sus propios sueños. Él es incapaz de quedarse quieto en ningún lugar y cree saber quién es. Y cada noche su amistad crece entre emails llenos de confidencias, dudas e inquietudes. Pero ¿qué ocurre cuando el paso del tiempo pone a prueba su relación? ¿Es posible colgarse de la luna junto a otra persona sin poner en riesgo el corazón?
Una historia sobre el amor, el destino y la búsqueda de uno mismo.
Porque a veces, solo hace falta mirar la luna para sentirte cerca de otra persona.
Título original: Nosotros en la luna | Autora: Alice Kellen | Saga: No, autoconclusivo |
Editorial: Planeta | Páginas: 477 | Goodreads
Editorial: Planeta | Páginas: 477 | Goodreads
¡Hola, hola!
Sé que hace un montón de tiempo que no pasaba por aquí, pero es que me apetecía tener el resto del mes de agosto de relax y apartarme un poco de las obligaciones del blog. Ya sabéis que el verano es algo más para desconectar y, aunque estuve leyendo un montón, tenía que separarme un poco de estar sentada enfrente del ordenador. De todas formas, tengo muchas ganas de contaros todo lo que he leído en agosto. Os recuerdo que también me podéis encontrar en Instagram, donde suelo subir fotos cada dos días sobre libros y también os cuento un poco pos stories lo que me van pareciendo mis lecturas.
Hoy os traigo la reseña de una de las autoras que he descubierto este año, Alice Kellen. El día que dejó de nevar en Alaska fue una de mis lecturas favoritas durante la cuarentena y la verdad es que lo disfruté de principio a fin. Tenía ganas de continuar leyendo a esta autora, así que me fui a por su obra más reciente en aquel momento: Nosotros en la luna, ¡y os traigo aquí mi opinión!
Ginger está en París, perdida, luchando contra una máquina de billetes. Rhys está en París, llevando el día a día, trabajando en lo que puede, hasta que encuentra a una chica peleándose con la máquina de billetes. Entre los dos, surge una amistad fugaz que se desarrollará por medio de emails donde se cuentan secretos, sus vidas cotidianas y cómo se van construyendo como personas. Ginger no tiene idea de lo que quiere hacer en su vida, mientras que Rhys, quien parece que se deja llevar por el viento, parece tener claro quién es. Pero, a medida que pasa el tiempo, huir del pasado no es una opción y tampoco se puede huir de esa noche en París.
Alice Kellen ha vuelto ha construirnos unos personajes perfectos: bien desarrollados y cercanos a sus lectores y a la vida real. Ginger es un personaje que se desarrolla bien, que ves cómo evoluciona a lo largo que transcurre el tiempo. La vemos madurar, tomar decisiones que impactarán en su futuro y logramos empatizar mucho con ese personaje por la cantidad de dudas e inseguridades que la invaden. Rhys, por otro lado, es una persona que quiere vivir el día a día y que se deja llevar por el momento. La verdad es que personaje también me ha gustado, aunque por otras razones: es realista y con el que te puedes sentir identificado a lo largo de la historia.
“Creo en instantes. Creo que puedes enamorarte muchas veces a lo largo de la vida; de la misma persona, de otras distintas, de ti mismo o solo de momentos.”
La verdad es que la relación amorosa me ha gustado mucho. Es una historia que se desarrolla muy despacio, un amor slowburn bien llevado, que junta a los protagonistas en un momento apoteósico. Estos dos personajes pueden parecer muy diferentes a nosotros, pero representan escenas muy realistas con las que yo me identifiqué en muchísimas ocasiones y, varias de ellas, me tocaron en el fondo.

Alice Kellen es una autora que no me canso de descubrir porque me encanta su pluma, la forma de describir y lo sencillas y cercanas que me parecen sus historias. Desde El día que dejó de nevar en Alaska, siempre recurro a ella cuando necesito una buena historia de amor, completamente sana y sin rastro de toxicidad.
En definitiva, Nosotros en la luna ha sido un libro en el que nos hemos podido enamorar de Ginger y Rhis, ya que he disfrutado de cómo se desarrollan sus historias paulatinamente a lo largo del tiempo donde el amor, la esperanza y la amistad son los valores principales, aunque también destaca el miedo a los «y si...». Una novela muy recomendable para esas tardes de verano en las que necesitas una historia ligera y que verdaderamente enganche.
¿Y vosotros? ¿Lo habéis leído o queréis hacerlo?
¡Gracias por leer ^^!